El tratamiento está dirigido a combatir el virus sincitial (VRS), principal causante de la infección en bebés. En Argentina se espera un severo brote de la enfermedad.

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Los recién nacidos y los bebés de hasta dos años de edad son los más propensos a padecer bronquiolitis, sobre todo durante el transcurso de los meses más fríos del año. Por esto, como una alternativa para reducir la elevada cifra de contagios a nivel mundial, se ha emprendido el ensayo de una vacuna de nanopartículas que pretende hacerle frente al virus sincitial (VRS), principal causante de la bronquiolitis.

El Hospital Vall d’Hebron, de Barcelona forma parte de este estudio que consistirá en administrar la vacuna a 20 mil mujeres embarazas, con la finalidad de que estas le transfieran la inmunidad a sus bebés. Los investigadores esperan que el proyecto tengas resultados en un año y medio y que, en caso de ser aprobado, el tratamiento pueda estar disponible para su uso a nivel global a partir de 2021.

Fernando Moraga, vicepresidente de la Asociación Española de Vacunología declaró en un encuentro con los medios de su país que esta “es la vacuna más esperada por los pediatras”, reconociendo la amplia cantidad de bebés y niños que deben ser internados (y, en ocasiones, con pronóstico reservado de vida) a causa de los efectos del virus sincitial. Según reseñó la agencia de noticias Europa Press, el también pediatra aseguró que se está trabajando a nivel mundial desde hace 30 años en la búsqueda de una solución a esta problemática, y que esta alternativa de inmunización a través de la madre parece ser la opción más favorable.

Vacunar a la gestante permitiría, pues, que los anticuerpos sean transmitidos a su hijo a través de la placenta y, posteriormente, durante la lactancia. Incluso, considerando experiencias anteriores, se estima que la protección conferida por la vacuna convencional contra la gripe llega a ser transmitida en un 50% al bebé lactante. Así lo detalló Magda Campins, médico del servicio de Medicina Preventiva y Epidemiología del Hospital Vall d’Hebron, quien apuntó que los recién nacidos “en esa etapa están muy desprotegidos”, porque no pueden recibir algunas de sus vacunas hasta haber alcanzado los seis meses.

Mientras la investigación continúa, las medidas de higiene y prevención convencionales y la administración de vacunas antigripales siguen siendo las alternativas para controlar la enfermedad.

En Argentina, donde la temperatura comenzó a descender con la cercanía del invierno, se ha alertado sobre el que podría ser un “severo brote” de bronquiolitis. Por este motivo, instituciones de salud como el Hospital Garraham han acondicionado sus espacios para prestar la atención necesaria a los más de 10 mil bebés y niños pequeños que, calculan, deberán ser atendidos por el personal pediátrico a causa de esta infección respiratoria entre mayo y octubre.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, el virus sincitial es el responsable de la muerte de 4 millones de niños al año a nivel mundial.