El TDAH se caracteriza por síntomas de falta de atención, hiperactividad e impulsividad, que pueden interferir con el funcionamiento diario y el rendimiento académico.

En México, al igual que en muchos otros países, el TDAH es reconocido como un trastorno médico y se aborda tanto desde la perspectiva clínica como de la educativa.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Epidemiología Psiquiátrica, el 6% de la población de entre 6 y 16 años padece este trastorno. Esto representa alrededor de un millón 600 mil menores, de los cuales solo el 8% está diagnosticado y tratado. Estas cifras lo revelan como un problema de salud pública.

Los especialistas afirman que hasta en 60% de los casos, el padecimiento se mantiene en la edad adulta y es común que los afectados se enteren que han vivido con el trastorno cuando buscan ayuda profesional para sus hijos.

Se estima que en México hay alrededor de dos millones de personas con trastorno de déficit de atención.

Manifestación, diagnóstico y detección

El TDAH se manifiesta principalmente entre los 4 y 12 años de edad. Se asocia en un 70% de los casos con otros trastornos como aprendizaje o del sueño, dislexia, ansiedad y depresión.

El diagnóstico y detección del TDAH puede tardar de tres a cinco años, debido a que los síntomas pueden confundirse con comportamientos propios de la crianza inadecuada e hiperactividad.

El tratamiento del TDAH es multimodal e individualizado, y puede incluir terapia psicológica y opciones de manejo conductual. Se calcula que del 25% al 50% de las personas con TDAH manifiestan signos de ansiedad, y del 32% al 53% presentan problemas con el abuso del alcohol y la cocaína.