La enfermedad cardiovascular (ECV) es la principal causa de muerte en América Latina y la presión arterial elevada representa más del 50% de las ECV. Desafortunadamente, más de una cuarta parte de las mujeres y 4 de cada 10 varones adultos tienen hipertensión. Sin embargo, el diagnóstico, tratamiento y control son deficitarios. Con el fin de abordar este importante problema de salud, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) lanzó la iniciativa Hearts, que incluye lineamientos para el manejo del riesgo de la enfermedad cardiovascular, a través de una aplicación de descarga gratuita llamada, también, Hearts.

 ¿De qué se trata Hearts y cómo permite el control de la hipertensión?

Hearts América Latina es la adaptación de la iniciativa global de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que lleva el mismo nombre. Se espera que sea el principal modelo para el manejo del riesgo de la enfermedad cardiovascular en la atención primaria de la salud para el año 2025.

En el marco de esta iniciativa se ideó una aplicación (app) cuyo componente principal es la calculadora de riesgo de ECV y de manejo de la hipertensión. La app se puede descargar de forma gratuita, en el sitio web de Hearts. Es trilingüe y está disponible para dispositivos móviles con sistema operativo Android o iOS.

Si bien la tecnología fue pensada para ser utilizada en la práctica clínica, cualquier persona que esté interesada en conocer su riesgo cardiovascular puede descargarla y utilizarla.

Características de la app

Hearts incluye un tutorial fácil de usar, mensajes sobre estimaciones de riesgo, recomendaciones clínicas y precisiones del efecto esperado al modificar los factores de riesgo tradicionales vinculados con las ECV.

Al igual que la aplicación previamente creada, llamada CardioCal 2014, Hearts incluye el cálculo del Índice de Masa Corporal (IMC) y la tasa de filtración glomerular en función de los valores de creatinina. Estos valores son relevantes para la evaluación integral del riesgo de ECV.

La aplicación presenta un breve video que describe los aspectos técnicos necesarios para obtener mediciones precisas de la presión arterial. Y, además, cuenta con consejos para modificar el riesgo de ECV a través de intervenciones farmacológicas y no farmacológicas.

Una vez que el usuario ingresa los datos solicitados, la calculadora cuantifica el riesgo de ECV a 10 años por infarto de miocardio, accidente cerebrovascular y muerte por ECV, con categorías de riesgo codificadas por colores que van del verde al rojo oscuro. 

Cómo fue desarrollada

Inicialmente, se generó un algoritmo utilizando hojas de cálculo para cada una de las 6 regiones de las Américas. Los datos de presión arterial sistólica, colesterol e IMC se asignaron aleatoriamente.

En total, 12 profesionales colaboraron en la primera evaluación. Particularmente, 6 de ellos reportaron sus resultados usando las tablas de colores y otros seis, empleando la calculadora. Como resultado, se detectaron 7 errores; 2, en el ingreso de datos; y 5, en las fórmulas.

Consecuentemente, los desarrolladores realizaron estas acciones:

• Cambiaron el punto de corte para el colesterol de 154 mg/dL a 155 mg/dL.
• Modificaron el punto de corte para la presión arterial sistólica de 179 mm Hg a 180 mm Hg.
• Detectaron un error en el código de las tablas del Caribe. El mismo procedimiento se repitió después de revisar las tablas y fórmulas originales.

Finalmente, la aplicación incorporó protocolos específicos y estandarizados de tratamiento de la hipertensión, definidos por los ministerios de salud de los países que implementan el programa Hearts.

¿Puede la app ser optimizada para el manejo de la hipertensión?

En el caso de las personas que tuvieron episodios cardiovasculares, la calculadora permite calcular la estimación del riesgo. En cambio, para personas de 40 a 74 años, sin ECV conocida, diabetes mellitus o enfermedad renal crónica, la aplicación puede ayudar a determinar cuándo sería necesario iniciar un tratamiento farmacológico antihipertensivo en un umbral más bajo, un tratamiento antihipertensivo objetivo y el intervalo de seguimiento recomendado.

En cuanto a los individuos de alto riesgo, como personas de 40 a 74 años diagnosticadas con enfermedad cardiovascular, diabetes o enfermedad renal crónica, el valor de la herramienta es mejorar la orientación del tratamiento para el manejo de factores de riesgo basados ​​en el perfil del individuo. Por ejemplo, la aplicación puede recomendar un objetivo de tratamiento más bajo para la presión arterial y seguimiento más frecuente para este tipo de pacientes. Además, se les puede recomendar que consideren la terapia con aspirina y estatinas.

La OPS señala en el documento de lanzamiento de esta tecnología que es probable que los profesionales de la salud descubran que usarla se vuelve más fácil a medida que la utilizan de manera frecuente. Asimismo, propone utilizarla para educar al paciente, informar al equipo de atención médica y ayudar a priorizar la atención dentro del sistema de salud.